El día 30, cercano a las 19 hs, se hacen presentes en la dependencia policial dos personas masculinas, de apellido Farías y Morales, quienes afirman que luego de protagonizar un conflicto vecinal eran perseguidos por dos personas que los querían agredir.
Los supuestos agresores, realizaban la persecución de estos sujetos a bordo de una camioneta Ford roja, y le rompieron un vidrio al auto en que se movían Farías y Morales.
En el momento que estos dos últimos quisieron realizar la denuncia se formó un tumulto generalizado en el que el joven Morales, de un cabezazo, le causa a un oficial una fractura de tabique. En este acto también es destruido uno de los vidrios de la puerta de entrada de la dependencia policial.
