Interpretación subjetiva de los sueños

 

El segundo método de interpretación de los sueños es interpretación en el plano subjetivo, vale decir, todas las personas y todas las cosas que veo en el sueño son partes de mi propia persona y me dicen algo sobre mi estado. El sueño me describe en imágenes en qué situación me encuentro. A menudo las imágenes son más útiles para representar nuestra situación personal que las descripciones racionales. Sin embargo las imágenes oníricas con frecuencia están abiertas a varias interpretaciones. No se las puede interpretar arbitrariamente, sino que más bien hay que contemplarlas en el contexto de nuestra historia de vida y de nuestro actual estado interior. De ahí que no tenga sentido consultar un diccionario de símbolos oníricos y pensar que el auto significa siempre el yo, que el caballo significa siempre la vitalidad, etc. Yo mismo debo asociar esas imágenes con lo que ellas evoquen en mí. Naturalmente el conocimiento del significado de los símbolos puede ser útil, pero hemos de conservar la libertad interior de relacionar esos símbolos con nuestra situación concreta.

Si sueño con un auto al cual no puedo controlar con el volante, y que me lleva a donde quiere sin dejarse dirigir por mí, eso puede ser un símbolo de que he perdido el control sobre mí mismo, de que estoy siendo gobernado por fuerzas inconscientes. O bien sueño que quiero subir con mi auto una cuesta. Acelero y acelero pero el auto no se mueve, no salgo del punto en el que estoy parado. Entonces habré de preguntarme por qué en mí no hay fuerzas suficientes para las tareas que me aguardan, si acaso no estoy ante una montaña de problemas sin haber cargado suficiente combustible. Y puedo meditar cuáles serían para mí las fuentes de energía. Si trato con Dios sobre ese sueño, entonces Dios me indicará ciertamente mis fuentes interiores que yo he cegado, me llamará la atención sobre su gracia, a la cual niego entrada en mi vida. Así pues el sueño no me da ninguna indicación concreta para realizar una acción determinada. Cuando despierto no sé exactamente lo que he de hacer. Sin embargo advertiré cual es el tema que debo abordar en los próximos días y semanas.

 

A. G.